Tiempo al tiempo.

Me vasto un segundo para distinguir entre amor y amistad.
Me faltan minutos a solas contigo.
Deseo horas y horas de amor.
Voy buscando días felices.
Encontrare la semana perfecta para escaparnos por el mundo y perdernos entre las personas.
En un mes, tendré miles de recuerdos a tu lado.
Este año, habremos sido tu y yo.

Y después nos llamamos desgraciados.

Cinco segundos en nuestra vida pasan totalmente desapercibidos. Pero, ¿qué pasaría si en esos cinco segundos sucediese algo que cambiase el curso de nuestra vida?
Entonces, posiblemente esos pocos segundos quedarían archivados en tu memoria, en la sección: Imposible borrar.
¿Cuántos recuerdos caben en la memoria de una persona?
Quizá más de dos, y más de tres. Puede que una multitud de ellos. Pero no todos tienen por qué ser buenos.
Hace algún tiempo que ando liada con la limpieza general de memoria. Intento olvidar mi pasado. Pero me resulta demasiado difícil. Hago y deshago anillas a mi antojo, intentando liberar los archivos que me acosan, pero por más que lo intento no lo consigo. Solo me queda suponer que los recuerdos buenos pueden contrarrestar aquellos recuerdos que son imposibles de olvidar, y que son un lastre en nuestra vida. Ahora que me paro a pensar, ¿qué recuerdos buenos tengo yo? Y es que, los más pequeños detalles, esos que aparentemente carecen de valor y que en poco tiempo uno acaba por olvidar, son los que realmente constituyen la verdadera felicidad de una persona.
Por absurdo que parezca, los momentos más placenteros son los que más facilmente se acaban olvidando;
Sin embargo, los humanos estamos destinados a limitar nuestra existencia a una vida llena de desdichas imposibles de borrar.

Es lo único que quiero que entiendas.

Últimamente la palabra miedo ha salido mucho de mi boca y ha rondado mucho por mi cabeza.
Y es que llegados a este punto me he dado cuenta de que tengo miedo. Miedo a perderte...
De todas las cosas que me dan miedo, perderte es la que más me hace temblar, sentir que el mundo se desmorona en cuestión de segundos; y es que pensar que te puedes ir en cualquier momento hace que se me corte la respiración. Sería inútil pedir que te quedes si deseas marchar, pero este miedo se apodera de mí hasta que me duele pensar en un nosotros. Tal vez son cosas mías, pero creo que las cosas han cambiado entre nosotros. Estas dudas me están matando y lo peor es que tú y yo estamos en el punto 0 y ni ascendemos ni descendemos, nos quedamos ahí... Y eso es algo que me irrita hasta un punto máximo.
Trás mucho pensar creo que este miedo de perderte, es que sé que si te pierdo, sufriré, recordaré todos y cada uno de nuestros momentos, cada beso, cada abrazo, cada sonrisa, cada mirada, cada conversación de madrugada y cada momento repleto de felicidad que pasé a tu lado.
No quiero perderte, es lo único que quiero que entiendas.

Intentar hacerte feliz y luchar por estar contigo.

Estás a 200 km, no puedo verte, no puedo oírte, solo puedo saber de tí a través de las putas redes sociales, y , si cruzo los dedos tal vez te conectes expresamente para hablar conmigo, como hacías antes.
Duele tanto que no te des cuenta de lo que estoy pasando, te echo de menos cada vez más y no puedo sacarte de mi cabeza, todo me recuerda a ti y estoy esperando aún que vuelvas, no soporto estar sin ti, no soporto pensar que todo se volvió a parar porque la quieres a ella o tal vez quieras a otra, por qué no puedes ser mía! Lo que mas me mata es estar preguntándome en que habré fallado, lo único que he echo ha sido quiererte más de lo que hasta tú imaginabas, intentar hacerte feliz y luchar por estar contigo.